PLAGAS DE INSECTOS EN GRANJAS

Otras de las causas de los descensos productivos que afectan al bolsillo del granjero. Las plagas de insectos, un problema a tener en cuenta…

Tendemos a pensar que hay cosas, “entes” y vida en general que son inherentes a las granjas, que no los podemos evitar, ni hacerlos desaparecer del medio pecuario. 

¡¡¡¡ESTO NO ES ASI!!!!

Querer es poder, y teniendo un plan de bioseguridad interna, que es una de las acciones básicas fundamentales para tener un control sobre las plagas en general y sobre las de insectos en particular.

¿Por qué controlar los insectos?

Son focos, vectores y portadores de multitud de enfermedades y patologías (salmonelosis, Shigelliosis, fiebre aftosa, gripe aviar…) transmisibles a los animales de producción además de producir inmunodepresión y estrés que reducen la producción animal perjudicando los rendimientos económicos de las explotaciones.

Las plagas más comunes que encontramos en las granjas son;

Moscas;

El hecho de que los animales se encuentren en producción intensiva, el que utilicen la materia orgánica, como el estiércol, purines…, para llevar a cabo su ciclo vital hacen de las moscas uno de los insectos más abundantes en las granjas. Aunque su presencia la tenemos normalizada su descontrol poblacional al alta, afecta a la salud y al bienestar animal, con lo que su control, antes de llegar a la época calurosa (época de mayor tasa poblacional) favorece que tengamos a raya el número de individuos.

La principal pauta que seguir para el control de la población de moscas, es la limpieza, la eliminación de materia orgánica, restos de comida, estiércol…. Así podemos mantener la población en números asumibles. 

La especie más común en granjas es la mosca doméstica (Musca domestica). La presión sobre este insecto no es solo beneficioso para la granja, sino también para las poblaciones rurales aledañas en las que una alta concentración de moscas puede derivar en un problema de salud pública.

Pulgas;

¡¡¡¡¡OJO con estas que son un verdadero problema sobre todo para los que somos un imán para ellas!!!!! 

Son parásitos externos que se alimentan de la sangre de otros animales. Existen diferentes especies como la pulga de perro, de gato la de ratón e incluso, el propio ser humano tiene la suya propia (Pullex irritans). Al ser un ectoparásito afecta directamente a la producción de los animales debido a las molestias de sus picaduras, causando irritabilidad, anemia, pérdidas de peso, dermatitis, caída del pelo o la lana pudiendo llegar a un choque anafiláctico en casos extremos. 

Como insectos que son tienen una gran capacidad reproductiva con lo que es fácil que si no se utilizan los tratamientos adecuados puedan aparecer resistencias.

Son sensibles a estímulos como vibraciones, presión, Co2 y a la luz, al igual que al frío y al calor o la humedad.

Igual de importante que el control de la propia población de pulgas lo es el control de sus vectores como los roedores, gatos, perros, zorros…

Escarabajos;

A pesar de que existen casi medio millón de especies de coleópteros descritas en el mundo, la plaga por excelencia en ganadería se da en avicultura y es la de Alphitobius diaperinus o escarabajo de la cama causante de fortísimos dolores de cabeza en los avicultores, sobre todo de carne de todo el mundo. Son vectores de virus, hongos, bacterias, protozoos (E. coli, Staphylococcus aureus, salmonella typhymurium, influenza aviar, Marek, viruela, Newcastle…

No son de menos importancia los daños estructurales que se pueden ocasionar en las granjas ya que se introducen en los aislantes perjudicándolo y reduciendo así la producción y subiendo el costo de calefacción y refrigeración. 

Su control requiere unos protocolos específicos que exigen la implicación constante del ganadero si se quiere mantener a raya la población de Alphitobius. Se deben llevar a cabo tratamientos previos, durante y después de la entrada y salida de los animales.

Garrapatas;

Al igual que las pulgas son parásitos externos, pero en vez de ser insectos pertenecen a la familia de los ácaros.

Son afines a altas temperaturas y humedad al igual que a las zonas de vegetación alta y densa. Son transmisoras de enfermedades graves, la enfermedad de Lyme, fiebre de Crimea -Congo, y en animales anemia en infestaciones graves. Desde el inicio de la subida de las temperaturas debemos de comenzar con los tratamientos preventivos para así tener controlada la población de garrapatas cuando se den las condiciones adecuadas para su reproducción

Cucarachas;

Aunque normalmente las asociamos a plagas urbanas, aunque en granjas también son bastante habituales. Con una morfología característica aplanada y con una capacidad de huida determinante para evitar a sus depredadores, las vemos corretear por las granjas sobre todo en vacíos sanitarios. Las encontramos donde hay materia orgánica en abundancia o restos de comida.

Nos encontramos 3 especies, la cucaracha alemana (Blatella germanica), cucaracha americana (Periplaneta amaericana) y la cucaracha negra (Blatta orientalis).

Debido a que su hábitat natural son zonas poco higiénicas transmiten multitud de enfermedades y bacterias.

El tratamiento, como siempre, debe comenzar con la prevención intentando dejar la menor suciedad posible y restos de comida.

Mosquitos;

Los mosquitos, consideran una granja en buen sitio para vivir, tienen animales de dónde alimentarse y charcas, charcos y recipientes donde encontrar agua donde reproducirse. 

Como hasta ahora he comentado, y el mosquito no iba a ser menos, transmite enfermedades como la fiebre aftosa, lengua azul, virus del Nilo y ello conlleva el significativo descenso productivo pertinente. Para reducir y controlar la población de mosquitos en una granja es importante cortar su ciclo reproductivo y de crecimiento, para lo que es necesario, en la medida de lo posible, evitar los estancamientos de agua al aire libre, bidones de agua, charcos, charcas, lixiviados… con esto evitamos que se produzcan explosiones poblacionales importantes.

Estos son algunos de los insectos que mayor daño generan en las granjas, su control recae 70% en las manos del granjero y 30% en manos de empresas como la nuestra (IBERSANIT SESRVICIOS DE BIOSEGURIDAD) que nos dedicamos a dar servicios de control aplicando tratamientos para cada especie y momento.

EL daño económico que causa una plaga en una granja es difícil de cuantificar, pero solo hay que sumar;

Descenso productivo

Bajas

Descenso reproductivo

Aumento de transmisión de enfermedades

Aumento de morbilidad

Etc.…

¡¡¡¡¡No dejes que las plagas se hagan dueñas de tu explotación!!!!!